Columnistas

Agricultura y desarrollo rural

MIGUEL ÁNGEL SÁNCHEZ Doctor en Ciencias Biológicas Director Ejecutivo de ChileBio

Por: MIGUEL ÁNGEL SÁNCHEZ | Publicado: Viernes 12 de marzo de 2021 a las 04:00 hrs.
  • T+
  • T-

Compartir

MIGUEL ÁNGEL SÁNCHEZ

La ministra de Agricultura, María Emilia Undurraga, en una reciente entrevista en DF, ha recalcado que la prioridad de su gestión será generar mayores condiciones de desarrollo rural, como a su vez acortar la brecha entre quienes viven en la ciudad y quienes habitan y trabajan el campo. Al respecto, no cabe más que aplaudir este énfasis.

Para lograr estas nuevas condiciones para el mundo rural, se hace necesario e imprescindible avanzar hacia una agricultura más sostenible. Es decir, capaz de producir más, usando menos superficie de tierra, utilizando menos insumos, menos agua, siendo más amigable con el medio ambiente, y generando más ingresos para los agricultores y trabajadores del campo.

Imagen foto_00000001

En esa línea, junto a otros enfoques y herramientas, un eje de acción clave es el recambio varietal. Es decir, desarrollar, obtener y utilizar nuevas variedades vegetales adaptadas a ciertas condiciones, y que permitan afrontar mejor los desafíos climáticos (como la sequía o las lluvias fuera de temporada), el ataque de los insectos plaga, hongos, enfermedades, etc. Y junto a ello potenciar las cualidades de sabor, color, aroma y sobre todo nutrición. Ello contribuirá sobre todo a que pequeños agricultores avancen en la senda del desarrollo rural, mejorando su calidad de vida.

Entre las distintas aproximaciones para obtener estas variedades vegetales, la biotecnología destaca ofreciendo herramientas que permiten obtener productos finales en menores tiempos y de manera más eficaz. Existe una extensa evidencia de cómo las técnicas biotecnológicas han mejorado las vida de los sectores rurales en países en desarrollo. El último informe de Graham Brookes y Peter Barfoot de la consultora PG Economics en el Reino Unido, reveló que los agricultores que cosecharon cultivos genéticamente modificados (una de las técnicas biotecnológicas más utilizadas en el mundo los últimos 25 años) obtuvieron ganancias adicionales acumuladas entre 1996 y 2018 equivalentes a 225 mil millones de dólares. Y estas cifras son sólo para la transgenia, una de las técnicas biotecnológicas utilizadas para la obtención de mejores variedades. Hoy, a través de otras herramientas como la edición de genes a través de CRISPR-CAS9, donde las investigadoras que descubrieron su función y aplicación obtuvieron el Nobel de Química en 2020, se pueden obtener mejoras genéticas y nuevas variedades, pero sin introducir genes de otros organismos, diferenciándose de los transgénicos.

En el Ministerio de Agricultura, ni en otros ministerios existe una Oficina de Biotecnología, encargada de prospectar y evaluar lo que ocurre en el mundo con estas tecnologías y su aplicabilidad en Chile. Su creación podría ser un buen punto de partida para contribuir al desarrollo rural y a una agricultura más sostenible.

Lo más leído